Estoy pasando por una etapa muy intensa de mi vida académica. Hace aproximadamente un mes comencé a escribir mi tesis de doctorado (pero no he acabado ni el primer capítulo), he estado trabajando en la escritura de algunos artículos y he estado leyendo con entusiasmo.

Es un periodo en el que se entrecruzan muchos sentimientos y sensaciones. Siento por ejemplo que estoy aprendiendo. Se va a escuchar presuntivo, pero siento como si me estuviera haciendo experto en un área particular de mi disciplina. Estoy construyéndome una visión general de lo que se hace, cómo se hace, quién lo está haciendo e incluso qué falta por hacer.

También siento miedo. Me da miedo no acabar a tiempo y perder algunos de los apoyos económicos que me permiten estudiar en este país donde la vida es tan costosa. Me da miedo producir un trabajo de mala calidad. Me atemoriza por ejemplo que mi inglés cuasi-autodidacto no sea lo suficientemente bueno para ser aceptado por los revisores. Me produce aprensión el pensar que mi trabajo no cumpla con los requerimientos académicos del comité evaluador. Siento presión cuando veo que algunos de mis colegas, que aunque comenzaron sus estudios antes que yo, entregan sus tesis a revisión o presentan sus exámenes de grado.

Todo esto me genera stress (seguramente mi esposa e hija lo notan). A veces me entra la histeria y pienso el por qué estoy aquí ¿por qué mejor no me dediqué a la albañilería donde no tendría que preocuparme por asuntos de veracidad, validez  y generalización de resultados? ¿No hubiera sido más fácil quedarme a hacer un doctorado en México? Afortunadamente estas crisis no son permanentes, ni muy frecuentes. Pero existen.

Tampoco quiero dar la impresión de que estoy sufriendo. Nunca pierdo de vista que estoy gozando de una gran oportunidad que me ha permitido desarrollarme como profesional y también como ser humano. Muchas otras veces me siento inspirado, potente, productivo, inclusivo, ecológico, creativo, veloz, cooperativo, útil, sazonado, sensible, musical, pro, independiente, responsable, apasionado, competente, arreglado, tolerante, feliz y hasta guapo.

En fin. Sólo estaba intentando dejar evidencia del periodo tan especial que estoy viviendo.

Mario