Limpios y peinados

Me la estaba pensando para escribir este episodio que fácilmente puede ser calificado como machista, ofensivo, incivilizado, vulgar o algo así; pero ese titubeo moral coincidió con mi descubrimiento de la obra de Charles Bukowski. Después de leer 40 páginas de uno de sus libros pensé: “Pues que chingados, es mi blog y escribo lo que quiero”

Me gustan las mujeres. En especial las bonitas. Me llaman la atención aquellas que son inteligentes. Pero hay una característica que me atrae especialmente: Que sean femeninas.

Es difícil describir mi concepto de feminidad, pero trataré de dar unas pistas. Creo que la feminidad es una actitud, no tiene que ver con que seas alta o bajita, morena o güera, gorda o flaca, joven o madura. Por ejemplo, conozco mujeres que a mi parecer no son bonitas, pero son muy femeninas. Eso las levanta. Su presencia es agradable. Hasta puedes olvidarte de lo poco agraciadas que son, sin necesidad de alcoholizarte. Por otro lado, conozco a mujeres que son bonitas, pero que no son muy femeninas. El día que lo intentan como que no funciona, algo falta. Puede ser la falta de práctica.

Aunque es importante, la forma de vestir no determina la feminidad. He visto mujeres vestidas con ropas de diseñador que cuestan más que lo que gano en un año, pero les falta gracia, actitud. También puedes encontrar damas con escotazo y enseñando pierna pero nomás no te transmiten nada. Es como ver un ventilador apagado.

¿Pero que tal cuando encuentras a alguien con la ropa y la actitud adecuada? Me cae que pierdes la capacidad de razonar (que en mi caso es mínima). Traes la imagen grabada por días…hasta años. Recuerdo las llamadas de larga distancia para expresarle a mi querida Idania lo que provoca en mí la imagen de sus femeninos pies usando esos zapatos tan sexys…

Podría seguir hablando de unas manos femeninas, del modo de hablar, la manera de caminar, la forma de mirar, pero no. El punto de este episodio es hablar de los pelos. En particular de aquellos situados en la zona del cuerpo humano donde el brazo se une al tronco: ¡Los pelos en las axilas de las mujeres no entran en mi concepción de feminidad! ¡Mucho menos cuando son más largos y abundantes que los que yo tengo!

No voy a decir nombres, sólo que estas diferencias culturales con Europa a veces me sorprenden en verdad. No estoy diciendo que los pelos en el sobaco de las mujeres sea un sinónimo de suciedad, sin duda debe haber muchos muy limpios y peinados. Sólo digo que no me parecen femeninos.

Ya estuve investigando y parece que esa costumbre, en algunos casos, está ligada a ideologías feministas. Bien por las feministas, pero…¿no se puede ser feminista y femenina a la vez?

M. Sánchez A.

Deja tu comentario

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s